Conclusión: Herbert

¡Hola a la comunidad!

Estos últimos días de la Isla de Club Penguin, el Equipo de CPI va a estar publicando los posibles desenlaces, conclusiones o los planes que tenían en mente sobre determinadas incógnitas que quedaron sin resolver.

El primer caso del que nos hablan es de Herbert. Nos explican el por qué de su odio hacia los pingüinos y hacia la isla. ¡Es una cuestión muy interesante que la verdad siempre nos hemos preguntado! Aquí te dejo lo que nos explicaron los moderadores:

Primero, es importante saber que Herbert siempre ha sido un poco temperamental. Los demás osos polares lo echaron del Polo Norte precisamente por la razón que imaginan: ser un genio villano.
A diferencia del Club Penguin clásico, esta versión de Herbert no odia el frío. Así que, ya que no podía vivir en el Polo Norte, tiene sentido que haya viajado a un entorno parecido: el Polo Sur.
El problema es que Herbert no aprendió la lección tras ser expulsado de su hogar. Más bien le dejó aún más frustrado el hecho de que los demás no aceptasen que era un genio (bueno, salvo su nuevo amigo Klutzy, que lo quería a pesar de todo). Cuando encontró la isla perfecta, lo último que quería era tener que compartirla con un montón de pingüinos ruidosos y odiosos. Además, oyó las leyendas sobre la isla: que estaba llena de maravillas y de tesoros increíbles. Y sabía que eso podía hacerle muy, muy poderoso. ¿Qué mejor manera para demostrar su genialidad al mundo?
Aunque claro, no salió como él se imaginaba. En vez de eso, la recién formada Elite Penguin Force detuvo a Herbert.
Algunos se han preguntado si, algún día, Herbert hará las paces con los pingüinos. Sobre ese tema, les diré que… Bueno, que no lo sé.
Sabemos que Herbert es capaz de entablar amistad. Después de todo, Klutzy es su amigo. Y durante la Fiesta Sigan Pingüineando, se infiltra en el restaurante subterráneo para comer una pizza. ¿Significa eso que está preparado para cambiar sus malvados modales?

¡Wow, hay cosas que no sabía! En la versión antigua de la isla, Herbert odiaba el frío, y cuando se fue del Polo Norte, una corriente de agua le llevó hacia nuestra preciada isla. Además del frío, odiaba lo ruidosos que éramos los pingüinos, aunque este aspecto no ha cambiado con respecto al Herbert de Club Penguin Island.

Creo que el personaje de este oso polar malvado vegetariano nos podría haber dado mucha diversión, aventura, misterio, acción, intriga, y podríamos haber vivido mil aventuras en contra de Herbert o incluso alguna vez trabajando con él, quién sabe. Me apena mucho que no podrá hacerse realidad.

¡Sigan pingüineando hasta el final, pingüinos! Aprovechen todo lo que puedan nuestra bonita isla.